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viernes, 7 de junio de 2019

LA BIBLIOTECA DE BABEL 

La escritura metódica me distrae de la presente condición de los hombres. La certidumbre de que todo está escrito nos anula o nos afantasma. Yo conozco distritos en que los jóvenes se prosternan ante los libros y besan con barbarie las páginas, pero no saben descifrar una sola letra. Las epidemias, las discordias heréticas, las peregrinaciones que inevitablemente degeneran en bandolerismo, han diezmado la población. Creo haber mencionado los suicidios, cada año más frecuentes. Quizá me engañen la vejez y el temor, pero sospecho que la especie humana - la única - está por extinguirse y que la Biblioteca perdurará: iluminada, solitaria, infinita, perfectamente inmóvil, armada de volúmenes preciosos, inútil, incorruptible, secreta. Acabo de escribir infinita. No he interpolado ese adjetivo por una costumbre retórica; digo que no es ilógico pensar que el mundo es infinito. Quienes lo juzgan limitado, postulan que en lugares remotos los corredores y escaleras y hexágonos pueden inconcebiblemente cesar, lo cual es absurdo. Quienes la imaginan sin límites, olvidan que los tiene el número posible de libros. Yo me atrevo a insinuar esta solución del antiguo problema: La biblioteca es ilimitada y periódica. Si un eterno viajero la atravesara en cualquier dirección, comprobaría al cabo de los siglos que los mismos volúmenes se repiten en el mismo desorden (que, repetido, sería un orden: el Orden). Mi soledad se alegra con esa elegante esperanza.
Jorge Luis Borges (fragmento del texto completo)



El mundo es móvil y las bibliotecas se tienen que adaptar a las nuevas reglas del juego. No por modernidad, sino por utilidad a sus usuarios.




Las bibliotecas deben formar a la sociedad ante los nuevos paradigmas informativos que van surgiendo y acercarles el uso de la nueva tecnología.




No hay que olvidarse de las bibliotecas escolares, las cuales son para muchas personas su primer contacto con el mundo de las bibliotecas. Hay que trabajar en hacer que las bibliotecas escolares sean una potencia dentro de la comunidad educativa.



Las bibliotecas son espacios de libertad y tienen que luchar contra la pobreza informativa. El acceso a la información desde las bibliotecas es prioritario para garantizar una vida mejor a la sociedad, pero bien es cierto que la legislación actual no ayuda mucho a esto. Las bibliotecas pueden cambiar la vida de las personas.

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